El orden del servicio eclesiástico a la luz de la biblia

El orden del servicio eclesiástico a la luz de la biblia 

Por: Dr. Félix Muñoz

“Si alguien afirma ser profeta o piensa que es espiritual, debería reconocer que lo que digo es un mandato del Señor mismo; pero si no lo reconoce, él tampoco será reconocido. Por lo tanto, mis amados hermanos, con todo corazón deseen profetizar y no prohíban que se hable en lenguas; pero asegúrense de que todo se haga de forma apropiada y con orden – 1 Cor 14:37-40 (NTV)”.

“La iglesia es un organismo vivo que expresa eficazmente la vida de Cristo en conformidad a Su Palabra” – Félix Muñoz

¿Verdaderamente la iglesia contemporánea expresa la vida de Cristo? ¿Da a entender al mundo la esencia de Su carácter? ¿Demuestra con sus acciones vivir en un orden en el cual la gente vea la diferencia?

Según el verso 38, Pablo afirma, si no van a aceptar lo que Dios dice mediante el cómo su agente, no hay manera alguna en que aprendan la Verdad en absoluto. Corinto permanecía ignorante ante la Verdad. Habían algunos que “procuraban profetizar” o mejor dicho querían profetizar, el texto no afirma que profetizaban (comunicaban la Escritura) sino que comunica que deseaban hacerlo, Las instrucciones de Pablo no tienen la intención de prohibir algo, sino ponerlas en su orden legitimo en conformidad a la Palabra. 

“El motivo primario en el servicio eclesiástico a Dios debe estar acorde a Su pleno carácter ordenado plasmado en las Escrituras” – Félix Muñoz.

La norma apostólica que los corintios habían pedido, en relación con “dones o personas espirituales” concluye con una clara afirmación de que todo lo que Pablo escribe es del Señor. El profeta y la persona espiritual sabrán que “lo que dice Pablo, lo dice Dios”. No hay fundamento para encasillar a estos capítulos en una situación particular de tiempo o lugar. Quienes la ignoren, incluyendo a los profetas y quienes ejerzan dones espirituales, deben ser, o serán, ignorados, es decir, que “todo aquel que cree ser espiritual y/o afirma comunicar las verdades divinas y no vive en el orden establecido por Dios en Su Palabra debe ser ignorado por completo”.

La profecía (Escritura) debe ser anhelada por sus beneficios para la iglesia. No se prohíbe el ejercicio del don de lenguas (Idiomas), pero sí se lo regula según lo expresado en este capítulo. Las normas que Pablo establece tienen como fin el lograr una reunión ordenada. Un aspecto del carácter de Dios es que es un Dios de orden (cf. v.33) y, para reflejarlo, todas las cosas en su iglesia deben ser hechas en forma decente y con orden. Este mandato incluye no sólo los temas tratados en estos capítulos, sino también los tratados en el cap. 11 de la primera carta a Corinto. Los caps. 11—14 reflejan la convicción teológica de que no es “mi” o “nuestra” iglesia, sino la asamblea o reunión de Dios, que la acción desinteresada de Cristo debe reflejarse en las relaciones y en la satisfacción de necesidades; que debe haber participación de hombres y mujeres; y que la edificación, en forma ordenada, de aquellos que se reúnen, es una prioridad.

Estos capítulos deben ser leídos con el fin de corregir los errores o deficiencias en la Iglesia. Es fácil leerlos y no ver el desafío personal que contienen. Pablo reclama un mayor compromiso para con las necesidades físicas y espirituales en las reuniones semanales de los cristianos, de lo que la mayoría de las reuniones de iglesias modernas permiten. Deben ser de inspiración para quienes asisten. En la iglesia del primer siglo no existía tal cosa como una congregación cerrada a los no creyentes y mucho menos una iglesia la cual era escandalosa y llamativa. Continúa en pie el desafío de que los cultos cristianos sean tales que el que viene de afuera pueda entrar y adorar y saber que Dios está realmente entre su pueblo por la diferencia ordenada que marca el mismo.

"Pero yo, por la abundancia de Tu misericordia entraré en Tu casa; Me postraré en Tu santo templo con reverencia - Sal 5:7 (NBLH)".

*Ejemplo 1 de desorden en el servicio eclesiástico (Video: Pulse aqui).

*Ejemplo 2 de desorden en el servicio eclesiastico (Video: Pulse aqui).