¿DEBEMOS JUZGAR A LOS FALSOS PROFETAS?

¿DEBEMOS JUZGAR A LOS FALSOS PROFETAS?

Autor: Michael Shephard.

He estado viendo un mal que se está dando en el cristianismo y al parecer hay quienes no están de acuerdo. Muchos piensan que no podemos emitir ningún tipo de juicio o en su defecto no juzgar y dejárselo a Dios, que sea Él quien juzgue.

Para este año la reforma protestante cumple sus 500 años y todos sabemos lo que ocurrió en aquel entonces, cuando Martín Lutero se opuso a las herejías de la Iglesia Católica Romana, esto me dice que él juzgó todo ese sistema herético, él en ningún momento se presentó pasivo o dijo algo como “yo no soy quien para juzgarlos” “eso se lo dejo a Dios” él hizo todo lo contrario, y lo hizo conforme a las Escrituras.

¿Si tenemos este ejemplo en la historia de la Iglesia por qué nosotros hoy deberíamos quedarnos de brazos cruzados ante toda la falsa enseñanza que se está viendo hoy?

¿Qué debo hacer cuando una enseñanza que aparenta ser bíblica no tiene ningún sustento en las Escrituras? Sencillo, no aceptarla y posterior a eso denunciarla con amor y mansedumbre, ya que al momento de hacerlo lo hacemos en contra de esa doctrina, no con quien la enseña.

Es triste ver que encuentres oposiciones por parte de hermanos por el simple hecho de denunciar lo que está mal. Si vamos a la biblia, y solo daré un ejemplo tenemos el caso de Jesús en el templo. ¿Qué fue lo que Él hizo? encontró un mercado en el templo, y allí se vendía y se negociaba de todo. Jesús al ver esto tomó un látigo y comenzó a sacar a todos los negociantes al punto de llamarle cueva de ladrones. Vuelvo y pregunto ¿Cómo se le llama a esa acción de Jesús? Jesús los juzgó. Él tampoco se mostró pasivo o dijo la expresión “mi Padre los juzgará” Él mismo se encargó de hacerlo.

En la actualidad se han estado levantando nuevas herejías que aparentan venir de parte de Dios y si aquellos que están enseñando todas esas cosas que no se conforman con la Biblia no son falsos profetas, surge la pregunta ¿entonces quienes son?

Mis queridos hermanos en la fe, estamos viviendo tiempos cuando nadie quiere padecer por la sana doctrina, estamos en los tiempos cuando aquellos quieren oír lo que quieren, y si esto sigue así como va en cualquier momento habrá alguien quien comience a hacer sacrificios de animales en la Iglesia evangélica. Si eso llegase a pasar ¿seguiremos diciendo que no podemos juzgar y que solo Dios es el que lo hará?

Para terminar esta parte les dejaré una breve descripción entre lo que es la falsa doctrina contra la sana doctrina. Esperando que el mismo les ayude a discernir la verdad del error.

“La falsa doctrina confunde la verdad y el error, impide la piedad, promueve el pecado, levanta un liderazgo impío, permite los falsos maestros, quita la bendición de Dios, debilita a la iglesia para los tiempos difíciles, y la debilita para el futuro.

La sana doctrina distingue la verdad del error, promueve la piedad, previene el pecado, califica el liderazgo piadoso, protege contra los falsos maestros, asegura la bendición de Dios, capacita a la iglesia para los tiempos de dificultad, y la fortalece para el futuro”.- Tim Challies.

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