BRASIL.- Un pastor de la Iglesia Bautista brasileña, celebró un matrimonio entre dos hombres en el estado de El Salvador, lo que ha generado la indignación de la comunidad cristiana local.
Alrededor del mundo, varias iglesias, ligadas a denominaciones protestantes históricas, han celebrado la unión de personas del mismo sexo. El caso que involucra a Willlian Veloso y Fagner Moreira fue destacado por medios locales y por el sitio BNews.
El pastor responsable de la celebración de la ceremonia fue Reuel Albuquerque da Silva, que se presenta como miembro de la Iglesia Bautista Nazareth y ordenado al ministerio hace siete años. Esta no fue la primera vez que celebró una ceremonia de unión de personas del mismo sexo, en 2017 realizó una ceremonia similar.
Reuel declaró que "hay siempre resistencia" a ese tipo de unión en el medio cristiano, sobre todo de los evangélicos conservadores", pero minimizó las críticas: "No los represento. Represento al Evangelio de las buenas nuevas", declaró.
La voluntad de celebrar ceremonias como esta es vista por Reuel como un "paso importante, de resistencia, de lidiar con estructuras opresivas y excluyentes". También cree que su gesto "hace posible acoger al público LGBT para que pueda ejercer su fe con su sexualidad, es decir, con total libertad".
"El conservadurismo está ahí. Es necesario disputar las narrativas que durante mucho tiempo han servido como mecanismo de opresión. El Evangelio de Cristo puede escandalizar, pero tiene como base fundamental el amor. Por lo tanto, el amor es el instrumento hermenéutico para cualquier lectura bíblica. En esta lógica, el amor es subversivo, desconfigura la lógica puesta", comentó Reuel.
Entre los dos homosexuales que se unieron, uno se declara evangélico. William Veloso, de 33 años, dice haberse convertido hace 11 años, es bachiller en Derecho y funcionario del Tribunal de Justicia del Estado de Bahía (TJ-BA). "Fui nacido y criado en la cuna católica, pero con 22 años de edad decidí cambiar a la iglesia evangélica. Sentí la presencia de Dios en mi vida de una manera que nunca había sentido igual", dijo.
Como su opción sexual no encontró aprobación en esa congregación, resolvió salir. "Permanecí por tres años. "Necesité salir por la presión de la dirección de la iglesia en tener que casarme (hasta arreglaron una esposa para mí), pero con el tiempo entendí que allí no estaba siendo yo".
Esta decisión lo mantuvo lejos de las iglesias, hasta que conoció al pastor Reuel, quien no tuvo ninguna objeción para realizar el matrimonio.
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