Moloch es el dios pagano que exigió a sus devotos que arrojaran a sus hijos a su vientre ardiente como un acto de adoración.
La ubicación de la exhibición no vale nada, ya que el Coliseo Romano es donde muchos cristianos primitivos fueron asesinados a manos de dictadores lunáticos temerosos de una fe que no podían detener.
Anteriormente, la Iglesia Católica había hecho del Coliseo un lugar sagrado para honrar a estos primeros cristianos martirizados por su fe, incluso colocando Estaciones de la Cruz allí para que los fieles contemplaran su sacrificio. Ahora está custodiado por el dios pagano Moloch, cuya demanda de sacrificio de niños se ha comparado con la epidemia moderna de aborto, y los fieles son recibidos con una estatua en honor a una deidad pagana cuyo espíritu asesino todavía busca matar niños.
Moloch se menciona varias veces en el Libro de Levítico, donde el sacrificio de niños está estrictamente prohibido. Algunos católicos tradicionales ven un momento irónico de esta exhibición, y otra confirmación de que su doctrina básica de la iglesia está siendo socavada desde dentro de la misma iglesia.
El debut de la estatua de Moloch coincidió con la reunión del sínodo de la Amazonía sudamericana en el Vaticano, donde se exhibieron estatuas paganas de fertilidad, incluso a la vista del Papa Francisco, quien claramente aprueba al dios Moloch. Hasta hay fieles católicos que están indignados.
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